Esta azotea oculta con vistas a la Torre Eiffel se convertirá en tu lugar de veraneo
¿Y si pudieras escapar del bullicio de París sin salir del corazón de la capital? El Pullman París Tour Eiffel reinventa el verano urbano con dos terrazas impresionantes, donde la elegancia se une a la relajación.
Un verano con vistas, al pie y en la cima de la Torre Eiffel
Con los primeros rayos de sol, el hotel Pullman Paris Tour Eiffel desvela sus dos direcciones emblemáticas para un verano inolvidable: la terraza FRAME, vibrante y acogedora, y la azotea confidencial Le 10e Ciel, una auténtica joya suspendida entre el cielo y la ciudad. Dos ambientes, una promesa: ofrecer el momento perfecto en un marco excepcional.
MARCO: elegancia informal al pie del monumento
Situada a un tiro de piedra del Campo de Marte, la terraza del FRAME tiene un ambiente chic pero accesible. El chef Alexandre Willaume ofrece una cocina contemporánea, precisa y soleada, en la que destacan los productos de temporada cuidadosamente seleccionados. Con platos para compartir, combinaciones atrevidas y cócteles de autor, el local hace gala de una verdadera generosidad culinaria, aclamada por el Collège Culinaire de France.
Pero FRAME también tiene un espíritu festivo: sesiones de DJ, brunchs musicales y veladas temáticas puntúan el verano, convirtiendo cada visita en un acontecimiento. Tanto si quieres comer al sol, tomar un aperitivo a la sombra o cenar con vistas a la Torre Eiffel iluminada, éste es el lugar donde hay que estar cuando hace buen tiempo.
Le 10e Ciel: la azotea más confidencial de París
Normalmente reservado para eventos privados, Le 10e Ciel se abre excepcionalmente para algunas veladas exclusivas. En lo alto del hotel, esta íntima azotea ofrece una vista panorámica de 360° de París, desde el Trocadero hasta Montmartre. En un ambiente acogedor, podrás disfrutar de champán, cócteles a medida y aperitivos gourmet, todo ello bañado por la luz dorada del atardecer.
En el Pullman París Tour Eiffel, cada detalle celebra el arte de vivir parisino, entre el refinamiento y el dejarse llevar. Estos dos lugares complementarios te invitan a vivir un verano aireado y elegante, encaramado por encima de las multitudes, con la mirada clavada en uno de los paisajes urbanos más bellos del mundo.
Lee también: Esta mágica azotea parisina reabre por fin (y no querrás perdértela)