El premio literario de Tropezón que sacude los códigos… y los géneros

Un escritor de 23 años, una novela incandescente, un jurado de iniciados y un hotel legendario. En Saint-Tropez, el Prix La Ponche 2025 ha elegido la dificultad y el deslumbramiento para encarnar su cuarta edición.

Una victoria literaria sobre el mar

El viernes 23 de mayo de 2025, el Hôtel de La Ponche volvió a su pasado de refugio intelectual. Fue aquí, entre el mar en calma y los recuerdos de Simone de Beauvoir y Boris Vian, donde el jurado del Premio La Ponche seleccionó Carnes, la primera novela deEsther Teillard publicada por Pauvert. El escenario: un bar apodado Saint-Germain-des-Prés-La Ponche, la luz dorada del final del día y una efervescencia de ideas impulsada por gente como David Foenkinos, Sophie Fontanel y Nathalie Azoulai.

“Carnes”, una obra de carne y sombras

Aquí no hay folclore sureño, sino prosa densa, entre Marsella y París, donde las mujeres inventadas por Esther Teillard fascinan tanto como inquietan. Nacidas en las playas catalanas, medio vulgares medio divinas, sus “cagoles” se convierten en poderosos arquetipos de una feminidad compleja. La violencia es poética, lo feo se convierte en sublime, y cada escena desprende una energía casi táctil.

Cuando la narradora de Carnes llega a París para estudiar en las Bellas Artes de Cergy, descubre otro tipo de veneno: el veneno más apagado de la élite. La autora explora la tensión entre la capital y las provincias sin maniqueísmos, utilizando un lenguaje a la vez crudo y preciso.

Un premio que afirma su singularidad

El Premio La Ponche, fundado por Lisa Vignoli, no busca el consenso. Premia la audacia, la ambigüedad y los textos que dejan huella. A través de Carnes, celebra esa modernidad paradójica en la que el lujo literario puede coexistir con la dureza de una mirada cruda sobre la juventud.

La recompensa no se limita a un cheque o una estatuilla: Esther Teillard se beneficiará de una residencia de escritura en el hotel. Una oportunidad para desarrollar una segunda novela bajo el sol del Mediterráneo.

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